¿El médico te ha mandado una resonancia magnética y no sabes lo que es? ¿Te gustaría saber cuanto cuesta una resonancia magnética? Aquí te vamos a ofrecer todos los datos que necesites.
Lo primero que se debe de saber es que este procedimiento médico se debe hacer solamente por prescripción médica, que significa que se debe de hacer porque uno de los médicos que tratan a un paciente lo ven necesario para diagnosticar algo, o, saber el alcance de alguna lesión.
Tras esto, hay que aclarar que, la resonancia es un procedimiento totalmente inofensivo, en el que, por medio de imanes y ondas de radio muy potentes se crea una imagen de la parte deseada del cuerpo. No representa ningún problema para el paciente ya que durante la sesión no se utilizan ningún tipo de radiación nociva.
Pese a ello, mucha gente tiene bastantes problemas a la hora de realizarse este tratamiento no invasivo, ya que, las resonancias magnéticas realizadas en los aparatos tradicionales son, bastante claustrofobicas y ruidosas. Para aplicar este estudio el paciente se debe de tumbar en una camilla y le colocarán una especie de jaula encima de la parte del cuerpo que necesita ser comprobada, para así evitar al máximo los movimientos voluntarios e involuntarios del cuerpo. Tras esto, se le introducirá en una especie de tubo, cerrado en el que, recibirá luces parecidos a potentes flashes, y escuchará un ruido muy potente. En muchas clínicas, para rebajar estas molestias pueden dar tapones y antifaces, para intentar relajar al paciente. Este procedimiento tiene una duración de 30 minutos hasta una hora, dependiendo de si se tiene que introducir contraste -una sustancia que tras inyectarla muestra con color una serie de zonas internas- o sin ella.
El coste, de la resonancia magnética en el aparato tradicional, dependerá de la zona para la que se aplique, y va, desde los 130 euros la cabeza y el cerebro, a los 309 euros de toda la columna, pasando por los 240 euros de las extremidades. En la máquina de resonancia abierta, por contra, será más económico ya que no necesita tanto tiempo, y va de los 95 a los 150 euros aproximadamente.
Aunque, hay que tener en cuenta que, como es un procedimiento que se aplica siempre por petición médica, estará, o bien cubierta por la seguridad social, o por el seguro sanitario, ya que pocos son los que todavía no cubre esta prueba.